Los quintos del 73 de Coreses se reunieron para celebrar sus 50 años. Un día de reencuentros "pues algunos llevábamos más de 30 años sin vernos", han explicado.
A la una del mediodía comenzaron la jornada festiva con un vermut y una charla para ponerse al día, treinta años, son muchos años. Después, acudieron con un centro de flores para rendir homenaje a un quinto que ya no está. Terminada la ofrenda, disfrutaron de una comida donde los recuerdos y las anécdotas se mezclaban con la sensación de que los años no habían pasado.

Sobre las siete de la tarde y acabados los actos más protocolarios, se trasladaron a un local alquilado para la ocasión, ya vistiendo la camiseta conmemorativa y con muchas ganas de seguir la fiesta.

Comida, música y bebida acompañaron las risas y bailes que se alargaron hasta altas horas de la madrugada, y habiendo acordado que repetirán cada año una comida para que no volviesen a pasar tantos años sin vernos.