FACUA-Consumidores en Acción insta al Gobierno a implantar de una vez un modelo de doble etiquetado, que ofrezca información a los consumidores sobre el precio en origen de los productos del campo junto al de venta al público, permitiéndoles conocer bajo qué condiciones y cuánto se está pagando a los productores.
Esta reclamación coincide con el compromiso adquirido por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de “fortalecer la Ley de la Cadena Alimentaria“, aunque sin aclarar cómo, que entró en vigor en 2023. Así lo ha declarado durante enla sesión de control al Ejecutivo. Los agricultores vienen denunciando la ausencia de inspecciones suficientes para detectar prácticas ilegales de imposición de venta a pérdidas, además de la ridícula cuantía de las pocas sanciones que trascienden.
Facua considera vital acercar a los consumidores de manera que puedan intervenir de forma efectiva en la cadena alimentaria, al poder tomar decisiones informadas sobre los productos que consumen. Para ello, resulta imprescindible que se les informe con la mayor transparencia y de forma adecuada sobre los alimentos que adquieren, los procesos de formación de precios, las diferencias de origen-destino, el lugar de origen o las condiciones en que se han producido.
Los últimos análisis de la asociación han puesto de relieve que determinados alimentos básicos se encarecen hasta en un 875% en los supermercados con respecto a su precio de origen. Una información que, actualmente, no llega al consumidor final, impidiéndole conocer qué empresas inflan más sus márgenes de beneficio y cuáles castigan más al sector primario obligándoles a ajustar excesivamente sus precios.