sábado. 20.04.2024
Foto archivo Google Maps
Foto archivo Google Maps

Ejecutivos de Google han reconocido que la compañía puso trabas a los los usuarios de móviles Android para que finalmente se decantaran por la opción de compartir sus datos de ubicación, al tiempo que hablan también también de presiones hacia determinados fabricantes de dispositivos móviles como LG para que continuaran por esa senda. Así lo han señalado durante un juicio en Estados Unidos que se ha abierto por esta causa. 

En concreto, Google se enfrenta a un juicio presentada por el fiscal general de Arizona hace un año por la recolección de datos de ubicación en terminales Android y que incluye casos de usuarios que expresamente habían desactivado la función de historial de localizaciones, tal y como recoge la investigación y ha informado originalmente Business Insider.

El exvicepresidente de Google y encargado de Google Maps, Jack Menzel, ha señalado durante este proceso que la única forma de que Google no obtenga esta información, es elegir ubicaciones de domicilio y de trabajo arbitrarias, para así confundir a la compañía multinacional.

La investigación difundida por Facua señala que la compañía estadounidense se decantó por este modelo tras probar anteriormente otras versiones de Android en las que las opciones de privacidad resultaban más sencillas de encontrar, por lo que dichas opciones quedaron finalmente relegadas al menú de ajustes del sistema operativo.

Asimismo, Google también presionó a fabricantes de dispositivos Android como LG, y consiguió que la marca surcoreana moviese a la segunda página del menú de ajustes la opción de dejar de compartir la ubicación con Google.

Google dificultó a los usuarios que escogieran no compartir sus datos de ubicación