La reapertura de las heladerías zamoranas pocos días antes del comienzo de la Semana Santa es ya una tradición en la capital. Este año, los tres establecimientos que registra Zamora han levantado las "persianas" justo cuando la primavera está dejando temperaturas más propias del invierno, con nevadas en provincias cercanas como León.
Los primeros compases de la primavera coincidieron con la reapertura de "La Valenciana", la primera heladería en abrir como señera en Zamora, hasta el punto de que muchas familias "procesionan" hasta la Avenida de Portugal para probar los helados artesanales que ofrece este negocio con 95 años de historia.
La firma cuenta con otro establecimiento en la calle Renova, Valenciana Shock, que ofrece un producto distinto pero igual de sabroso en una zona de obligado paso para el turista que quiera disfrutar del "frío" de la Semana Santa de Zamora.
La oferta se completa con otra heladería en la calle Ramos Carrión, que acaba de abrir sus puertas, una seña de que La Pasión zamorana se acerca.
Los llamados “Smöoy”, que se pueden saborear en plena Plaza Mayor, tienen cada vez más aceptación, principalmente entre los más jóvenes, con un paladar más acostumbrado a los yogures helados y los granizados.
