Mañana fría y de espera en busca de los preciados roscones artesanos.
El día amanecía frío en la ciudad con -4ºC aún con la salida del sol que parece traer al menos el deshielo de tejados y coches. Zamora despertaba con la mira puesta en el tradicional roscón de Reyes que decenas de pastelerías, tienen hoy como atracción especial, el día de la ilusión de los más pequeños y también de los mayores antes de volver a la rutina de un mes de enero que volverá a ser cuesta arriba y de depresión postvacacional.
A primera hora de la mañana las colas en pastelerías y obradores era ya visible.