Comer en modo experimental con resultados de excelencia culinaria y disfrute global es posible. Y lo es en Zamora, y concretamente en el C.I.F.P. Ciudad de Zamora donde la inexperiencia de los cocineros y camareros, es totalmente asumible, muchos de los restaurantes que lo parecen en su aspecto exterior ya quisieran a veces contar con profesionales formados en estos fogones y cocinas y en este restaurante "amateur" en el que se come mejor que en muchos de los que se denominan y ponen tenedores y marchamos con nombres de ruedas y guías...De la antigua UNI siguen saliendo verdaderos expertos en la materia culinaria y en el trato con el cliente.
Quizá sea deformación profesional o cocinitis intrínseca, o quizá el haber sido el medio pionero en transmitir a través de Cocinando Calidad una filosofía que hoy se mantiene y que es punta de lanza de muchos de los nuevos establecimientos de la ciudad, lugares que cuentan con los chicos y chicas que hace cuatro o cinco años sacaron adelante su titulación en esta escuela del fogón, de la cazuela la sartén y el puchero y de la atención al cliente y de las buenas maneras y formas tanto en la cocina como en la sala.
Por 12 euros varios menús con varias propuestas que pasan por un estupendo aperitivo, un buen entrante, un primero lujoso y de ponerle un sobresaliente con un segundo contundente y digno de cualquier chef de los de ahora, además de un postre de los de chuparse los dedos. Estas son las propuestas que en esta jornada atendían las profesoras Aurora y Tamara, una en cocina y la otra en sala respectivamente. Los chicos y chicas nerviosos y con muchas ganas de debutar para mantener una experiencia y como no una nota que les llevará a obtener un título en este lar tan complicado de la cocina.
En los fogones nervios y mucha atención al resultado y al emplatado que al fin y a la postre es una de las cosas que hacen que un plato tenga un especial sentido. Nervios también en la sala en las posiciones, en la atención, y a la falta de soltura lógica que en sus primeras tomas de comanda asustan pero sobre todo en sus primeros pasos y puestas en escena real.
Profesoras atentas como ardillas ante la caída de las piñas que hoy no tocaron suelo, un gran servicio en las mesas para cerca de cuatro decenas de comensales que hoy pudieron degustar varias propuestas de las que pudimos probar todas, gracias también al intercambio de platos que como si de un carrusel se tratara dimos buena cuenta en casi todas las mesas. Probar todo era lo lógico y así fue el momento de probar los entrantes como una tosta de sardina con pintura de aceite de oliva, o una ensalada con cítricos y escabeche, también un arroz meloso o rissoto de verduras espectacular, un tartar de salmón con guarnición, una sopa de pescado y marisco, unos chipirones en su tinta perfectos, unas carrilleras al estilo tradicional o un rape con guarnición de escándalo, que dieron paso a diferentes postres que entre chocolates, bizcochos y cremas dieron a una comida "normal" y sin espera de nada espectacular un salto a "que bien hemos comido, que variedad, y que bueno estaba todo".
Pena y triste que no haya muchas más oportunidades y que haya que reservar con mucha antelación porque la realidad supera al rumor y a la ficción de que en el CIFP de Zamora se come realmente bien tirando a notablemente bien, con grandes acercamientos al sobresaliente.
Una escuela de cocina que cuenta con grandes profesores, con maestros en la cocina que hoy han vuelto a sorprender a cerca de cuarenta comensales que más que satisfechos ya piensan en poder repetir en breve. Gracias a todos en volver ya estamos...
Galería de imágenes ( Fco Colmenero)