Desde el año 2000, cuando se lanzó la primera edición, Izquierda Unida ha ido lanzando en las elecciones y en este 2019 vuelve a sacar una edición especial con información, tanto del propio partido como de la ciudad y los diferentes grupos políticos.
Francisco Guarido, candidato a la Alcaldía de Zamora, destacaba que se trata de "un esfuerzo de pedagogía", además de tratarse de un periódico que "ha influido mucho en la sociedad y en la política zamorana". Desde el año 2000, momento en el que se publicaba y se divulgaba por primera vez la relación de gastos de protocolo del Ayuntamiento en el que gobernaba Antonio Vázquez, el partido progresista ha seguido publicando este boletín "de información".
Un total de 7.000 kg y 36.000 ejemplares, con la edición y maqueaado de Miguel Ángel Viñas, Izqueirda Unida lanza este "periódico informativo", en el que se expone un "balance de lo hecho en los cuatro años y un programa para los próximos cuatro", señalaba Guarido, que añadía que se ha editado con "rigor y reflexión, con el objetivo de "mover a debate" a los políticos y a la sociedad.
Además, Francisco Guarido hacía referencia a la campaña y aseguraba que Izquierda Unida va a "huir de los mega proyectos de otros partidos, que crean ilusiones que no están aterrizadas en el Ayuntamiento", unos proyectos por los que Guarido se preguntaba "de dónde sale el dinero". A su vez, aseguraba que el boletín provincial "va a servir a todos los partidos para aterrizar y hacer política con los pies en el suelo", un boletín que también servirá a los ciudadanos "para que puedan elegir mejor el 26 de mayo".
Guarido también recordó los tres acuerdos aprobados recientemente con la Junta de Castilla y León, que son el centro de autismo, algo en lo que "nos hemos volcado, le pedí a Herrera que hiciera el esfuerzo", señalaba el alcalde de Zamora; el conservatorio de música, con una licitación de 910.000 euros y 13 millones de euros en obra y, por último, el centro cívico, cuyo convenio se llevará al próximo pleno.
Además, el líder de IU en Zamora señalaba que en el casco antiguo es la Iglesia de Madrid quien tiene que llegar a acuerdos con el Estado para poner a disposición "no del Ayuntamiento, sino de la sociedad" las viviendas vacías que tiene ocupadas, con el objetivo de abrir posibilidades a la construcción y habitabilidad del casco antiguo de Zamora.