El Ayuntamiento de Zamora ha presentado su firme compromiso con la sostenibilidad en FITUR, liderando un proyecto ambicioso que transformará la ciudad en un espacio más verde y resiliente. Según Christoph Strieder, concejal de turismo, la premisa es clara, "sin sostenibilidad no hay turismo". Y es que en esta 44ª edición, FITUR se presenta como altavoz para las buenas prácticas y el impulso de estrategias orientadas a fomentar un turismo respetuoso con el medioambiente, lo que a su vez potencia el desarrollo de una economía cada vez más sostenible.
El proyecto 'Renaturaliza', anunciado en octubre del pasado año, contempla veintidós actuaciones que se llevarán a cabo hasta diciembre de 2025, con el objetivo de renaturalizar y fortalecer la resiliencia de la ciudad. Entre las iniciativas destacadas se encuentra la creación de zonas de bajas emisiones, la promoción de la movilidad sostenible, mejoras en la eficiencia energética de edificios y, especialmente, la renaturalización y fomento de la biodiversidad.
Actualmente, destacan varios programas que están cambiando la oferta turística: los dos Planes de Sostenibilidad Turística en destino: Zamora Paisaje Cultural y el plan de la Diputación/Patronato de Turismo: Corredor Ecoturístico Zamora y el Duero; el proyecto Renaturalización, de la Fundación Biodiversidad; la importante participación del Ayuntamiento en el POCTEP, que está desarrollando un observatorio ecológico transfronterizo, y naturalmente el proyecto de candidatura de patrimonio mundial de la UNESCO 'Zamora Paisaje Cultural'. Todos ellas dedicadas a conseguir un equilibrio entre protección del medioambiente y la actividad económica.
Una de las iniciativas más destacadas es la creación de un corredor ecológico en torno a la muralla, con una inversión de 824.011,08 euros. Este proyecto incluirá un ajardinamiento de 18.235 metros cuadrados, transformando la zona en un espacio público accesible y sostenible. La regeneración de lugares emblemáticos como la Isla de las Pallas, Tres Árboles, los Pelambres y los Compadres, junto con la renaturalización del parque de Olivares y la mejora del hábitat en Valorio, forman parte de este ambicioso plan.
La calle Doctor Fleming y diversos puntos de la ciudad también experimentarán procesos de renaturalización en los próximos dos años. Proyectos como la transformación del antiguo vertedero municipal en un bosque perirubano, la introducción de áreas arboladas y maceteros de alta capacidad entre Santa Clara y la Plaza Constitución, y la creación de tres jardines suspendidos y dos techos verticales en La Marina, San Martín y Plaza de Castilla y León, son solo algunas de las medidas que convertirán a Zamora en un referente de ciudad sostenible. Este enfoque integral busca no solo mejorar la calidad de vida de los residentes, sino también atraer a turistas comprometidos con el medio ambiente. Con estas acciones, Zamora reafirma su posición como un destino turístico responsable y respetuoso con el entorno.
