Ni el intenso frío ni la lluvia de la tarde de este sábado ha logrado frenar el entusiasmo y la participación en el Desfile de Ramos de Navidad, que llenó las calles de Zamora de tradición, folclore y color. Cerca de 400 personas, ataviadas con trajes antiguos representativos de las distintas comarcas zamoranas, arroparon un desfile en el que participaron más de una docena de ramos de Navidad engalanados, recorriendo el centro de la ciudad.
El desfile, abierto a la participación de cualquier persona que quisiera sumarse con su propio ramo, partió de la Plaza de La Marina y finalizó en la Plaza de Viriato. Entre las creaciones destacaron ramos llegados desde distintos puntos del noroeste peninsular como Asturias, León, Salamanca, Zamora capital, Puebla de Sanabria, Villablino y Benavente, mostrando la riqueza y diversidad de esta tradición ancestral.
La iniciativa, organizada por el Ayuntamiento de Zamora y la Agrupación Belenista La Morana, tiene como objetivo difundir, conservar y restaurar la tradición de los ramos de Navidad, que antiguamente se colocaban en las casas con la llegada de estas fechas. Además, el proyecto se amplía con el adorno de 16 establecimientos comerciales y escaparates, así como espacios en distintos barrios de la capital, dando lugar a la Ruta Urbana de Ramos.
Esta ruta podrá visitarse hasta el 6 de enero de 2026, permitiendo a vecinos y visitantes descubrir distintos tipos de ramos y conocer su significado cultural y simbólico.
El desfile estuvo amenizado por la música de la Escuela de Folklore de Zamora, las Aulas de Puebla de Sanabria y Benavente y la Asociación Música y Tradición Popular de Zamora, cuyos integrantes interpretaron ramos, villancicos, logas y cantares navideños, creando una atmósfera única y cargada de emoción.
Estas creaciones son réplicas de los ramos tradicionales, elaborados antiguamente por grupos de mujeres que se organizaban para costearlos como una forma de culto a la naturaleza y al solsticio de invierno, una tradición que Zamora recupera y pone en valor como parte esencial de su patrimonio cultural inmaterial.