La Universidad de Salamanca, a través de su Instituto de Neurociencias de Castilla y León, forma parte junto a la Universidad de Coímbra y el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Salamanca (IBSAL) del consorcio ibérico de investigación que desarrolla una nueva plataforma de medicina de precisión y modelos celulares para mejorar el diagnóstico y el tratamiento futuro de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), enfermedad degenerativa rara y rápidamente progresiva para la que no existe cura.
Financiado con más de 750.000 euros (757.895,46 euros) por la Comisión Europea -en el marco del Programa Interreg España-Portugal de Cooperación Transfronteriza (POCTEP) 2021-2027 y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER)-, el proyecto con el acrónimo Cross-3DTool-4ALS creará una innovadora plataforma de medicina de precisión dedicada a la ELA, proporcionando nuevos modelos celulares más realistas que permitirán estudiar la enfermedad y mejores y nuevas terapias.
La medicina de precisión sirve para mejorar la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de patologías combinando los datos habitualmente utilizados en el diagnóstico y tratamiento, como los antecedentes familiares y los síntomas, con el perfil genético de cada persona.
Según explican desde el consorcio de investigación "este enfoque no invasivo, que resulta de la recogida de orina y el posterior aislamiento de las células madre presentes, representa un avance significativo en la investigación de la enfermedad, ya que no es posible extraer neuronas directamente de los pacientes y personas sanas".
Este es un avance importante en la investigación de la ELA, ya que los modelos existentes para estudiar la enfermedad son limitados y a menudo se basan en modelos animales, que no representan completamente al ser humano. “Con el modelo 3D que vamos a desarrollar como parte de este proyecto podremos comprender mejor los mecanismos celulares y moleculares que ocurren en la enfermedad y así identificar nuevas dianas terapéuticas", añaden. El modelo que creará el equipo de investigación permitirá comprender cómo interactúan las células, de una manera que imita lo que sucede en los humanos.