La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha presentado una propuesta para las próximas reuniones en Bruselas sobre el sector vitivinícola, sugiriendo que se incluyan medidas con criterios sociales para facilitar su reestructuración. Durante la sectorial convocada por la Dirección General de Producciones y Mercados Agrarios, la organización destacó la necesidad de adaptar las intervenciones de la Intervención Sectorial Vitivinícola (ISV) para abordar los desafíos actuales del sector.
Entre las propuestas de Unión de Uniones se encuentran la reconsideración de la medida de reestructuración y reconversión, ajustándola a las señales del mercado. También se aboga por permitir inversiones en el sector productor para enfrentar los retos del cambio climático. Adicionalmente, se sugiere fomentar la promoción de pequeñas y medianas bodegas en mercados internacionales y comunitarios, y explorar la posibilidad de destilar subproductos en lugar de recurrir a las destilaciones de crisis.
La organización enfatiza la importancia de adaptar el sector a un nuevo contexto económico, apoyado por fondos extraordinarios para recuperar las perspectivas futuras del cultivo. También señalan que el sector vitivinícola ha sufrido la falta de ayudas estatales por las consecuencias de la sequía y las perturbaciones de los mercados tras la pandemia, debilitando así los canales de comercialización.
Unión de Uniones también aborda el problema del relevo generacional en el sector, que cuenta con más de medio millón de explotaciones con una superficie media de apenas 1,7 hectáreas. La organización considera urgente trabajar en la rentabilidad del sector para atraer a nuevas generaciones y garantizar su continuidad. Además, se propone utilizar la crisis actual para ofrecer alternativas a los viticultores que deseen abandonar el sector y permitir la reestructuración de las explotaciones que continúen.
