En un emotivo acto celebrado el domingo 12 de mayo en la parroquia de San Pedro de Bembibre, la Diócesis de Astorga ha recibido a su primera Virgen Consagrada, Mª Ángeles Castro. Este acontecimiento litúrgico, presidido por el obispo de Astorga, marca un hito en la historia religiosa de la región.
La ceremonia de consagración es un rito cargado de simbolismo, donde la nueva virgen consagrada es vestida como una novia, recibiendo del obispo un anillo como símbolo de unión con Cristo y el velo, así como el libro de la oración de la iglesia. Este acto representa la unión mística entre Cristo y la Iglesia, y la consagrada personifica esa unión, manifestando un vínculo nupcial indisoluble, perpetuo e irrevocable.
"Es un honor ser la primera Virgen Consagrada en la Diócesis de Astorga", declaró Mª Ángeles Castro. "En España, somos alrededor de 250 en todo el país, y me siento privilegiada de representar a esta comunidad en la provincia de León".
Las Vírgenes Consagradas forman parte del Ordo Virginum, un orden que existe desde los primeros tiempos de la iglesia. A través de un juramento público, estas mujeres consagran su cuerpo y su espíritu a Dios de forma completa y perpetua.
La comunidad religiosa ha acogido con alegría este evento, reconociendo en Mª Ángeles un testimonio vivo de fe y entrega. La presencia activa de la comunidad en la ceremonia subraya la importancia de este acto para la vida religiosa local.
