La Junta de Castilla y León ha anunciado la ampliación y simplificación de las ayudas destinadas a los trabajadores afectados por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). La Consejería de Industria, Comercio y Empleo ha publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) la modificación de las bases que regulan esta convocatoria, con el objetivo de alcanzar a más beneficiarios y agilizar el acceso a estas subvenciones.
Entre los cambios más relevantes se encuentra la ampliación del colectivo de trabajadores elegibles. A partir de ahora, también podrán acceder a las ayudas aquellos empleados en ERTE debido a resoluciones judiciales dentro de procedimientos concursales, un grupo que hasta el momento quedaba excluido. Además, se elimina la restricción que impedía a los trabajadores de empresas con más de mil empleados acceder a las ayudas, garantizando un trato equitativo sin importar el tamaño de la compañía.
Otro aspecto clave de la reforma es la simplificación de los requisitos administrativos. Se suprime la necesidad de presentar el certificado de empresa cuando el trabajador ya recibe la prestación por desempleo, así como la exigencia de aportar las últimas cuatro nóminas. También se ha eliminado la graduación económica, estableciéndose una cuantía fija de 10 euros por jornada completa de suspensión, con un límite de 300 jornadas.
Las ayudas están dirigidas a compensar la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores afectados por suspensiones o reducciones de jornada en Castilla y León. También podrán beneficiarse aquellos con contrato indefinido fijo discontinuo cuya actividad haya finalizado antes de lo previsto, así como quienes hayan sufrido interrupciones en su contrato o retrasos en su reincorporación. Para acceder a estas subvenciones, los trabajadores deben haber estado afectados por un ERTE durante al menos 10 días en el periodo subvencionable y tener una base de cotización por contingencias comunes inferior a 4.000 euros mensuales.
Con estas modificaciones, la Junta busca adaptar las ayudas a las nuevas realidades del mercado laboral y garantizar que el apoyo económico llegue de manera más justa y eficiente a quienes más lo necesitan.