Este viernes, la Comisión de Educación de Castilla y León decidirá si el 2º de Bachillerato incorporará una asignatura de Educación Física. La propuesta, promovida por COLEF Castilla y León, busca contrarrestar el descenso de actividad física en adolescentes y reducir los efectos negativos del sedentarismo y la falta de ejercicio sobre la salud física y mental de los jóvenes.
En la actualidad, el 2º curso de Bachillerato está orientado hacia la preparación para la Prueba de Acceso a la Universidad, lo cual limita el tiempo para actividades físicas. COLEF resalta que la inclusión de esta asignatura podría ofrecer estrategias para mantener un estilo de vida activo pese a las barreras del tiempo y la presión académica.
El abandono de la práctica deportiva en la adolescencia ronda el 35,5%, y se atribuye principalmente a la falta de tiempo. Introducir Educación Física en este curso, según COLEF, revertiría esa tendencia y fomentaría el ejercicio regular, ayudando a los estudiantes a gestionar el estrés y mejorar su bienestar general.
Además, estudios recientes han demostrado que la actividad física contribuye a mejorar el rendimiento académico y las habilidades de aprendizaje. Con esta asignatura, los estudiantes podrían mejorar su memoria y concentración, lo que impactaría positivamente en sus resultados tanto en el Bachillerato como en las pruebas de acceso a la universidad.
Si se aprueba, Castilla y León se uniría a otras nueve comunidades autónomas que ya implementaron la asignatura, como Valencia y Madrid. Esto situaría a la región en la vanguardia de las políticas educativas orientadas a la salud, favoreciendo el desarrollo integral y hábitos saludables en los jóvenes.
