Tres fallecidos por ahogamiento durante el mes de septiembre elevan a doce la cifra de ahogados en los espacios acuáticos de Castilla y León. En todos los casos del año, los espacios acuáticos castellano y leoneses no tenían servicio de atención, vigilancia y socorrismo activo en el momento de los sucesos.
Septiembre, abril y julio son los meses que han registrado un mayor número de ahogamientos, con tres fallecidos en cada caso, seguidos de dos en el mes de mayo y uno en agosto, según el balance del Informe Nacional de Ahogamientos (INA) que elabora la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo (RFESS). Durante los meses de enero, febrero, marzo y junio no se ha registrado ninguna muerte por ahogamiento en la Comunidad.
En el conjunto de España, los fallecidos por ahogamiento en espacios acuáticos se elevan hasta la fecha a 302 víctimas, 107 menos que en el mismo periodo del año anterior, lo que indica un descenso del 26,2 %.
En la Comunidad, la cifra es inferior a la que se dio en el 2017 con un óbito menos, aunque continúa situando a Castilla y León en el primer territorio interior de España en número de fallecidos por esta causa.
Salamanca y León son las provincias donde se han contabilizado mayor número de muertes por ahogamiento con 4 y el 33,3 %, seguida de Soria, Valladolid y Zamora con un ahogado, el 8,3 %, en cada territorio, mientras que en Palencia y Segovia no se han producido incidentes con muerte en espacios acuáticos.
El perfil de la víctima mortal por ahogamiento en la Castilla y León, en los ocho primeros meses del año, es un varón de nacionalidad española (92 % de los casos), de más de 35 años que pierde la vida en un río (92 %).