viernes. 29.03.2024
Aspecto que presenta desde esta semana la antigua oficina de Ibercaja
Aspecto que presenta desde esta semana la antigua oficina de Ibercaja

La dispersión geográfica manda y, con ella, tristemente la retirada y clausura de muchas de las sucursales que están echando el cierre y obligando a los vecinos a buscarse la vida.

Es el caso de Moralina de Sayago que, desde esta semana, se despedía de una de las dos sucursales que atendía a los vecinos del municipio y alrededores, todo un salvavidas para la gente también de Torregamones, Villadepera, Villardiegua, Gamones, Moral o Argañin para las que quedaba más cercano que la oficina de Moralina. 

El desmantelamiento supone el fin de un progresivo recorte en la atención que pasó de ser diario a una vez por semana para, finalmente, cerrar sus puertas dejando con pocas opciones a los que mantienen sus cartillas con esta entidad que ya solo disponen como puntos más próximos Bermillo y Fermoselle. 

Con este cierre, Moralina sólo dispone ya de la sucursal de Caja Rural, ubicada en pleno centro frente a las cuatro sucursales de Bermillo, afianzándose como centro neurálgico para realizar todas las gestiones bancarias en una zona en la que, a la espera de que la fibra termine de ser una realidad, los trámites online brillan por su ausencia y obligan a los más mayores a tener que desplazarse. 

El cierre de Unicaja en Moralina deja sin opciones a decenas de vecinos