El aumento de la siniestralidad vial es una tónica que ya comenzó a apreciarse en 2022 y que se mantiene durante el primer trimestre del año. Así lo ponen de manifiesto los datos del balance de tráfico que ha dado a conocer hoy la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones. Unos datos que dibujan un panorama común tanto en las carreteras regionales como en las de la provincia.
En lo que va de año 2023, Zamora registra 6 fallecidos frente a los 3 del mismo periodo de 2022, lo que supone doblar la siniestralidad vial entre los meses de enero a abril. Durante ese periodo de tiempo se han contabilizado un total de 5 accidentes mortales frente a los 3 registrados en el mismo periodo del año 2022.
Unos malos datos que continúan en aumento teniendo en cuenta que el año 2022 se saldó en la provincia con un total de 126 accidentes, 15 siniestros mortales y 17 fallecidos en interurbana, un 35,3% más de decesos que podrían haberse evitado sobre el asfalto con respecto a los sufridos en el año 2019, que se toma como referencia al ser el último en época prepandemia.
Unos siniestros en los que además tiene un peso relativamente alto el exceso de velocidad. Por ello la DGT ha anunciado una nueva campaña de control de los límites establecidos en las diferentes vías interurbanas y que se realizará entre el 17 y el 23 de abril. Desde la Delegación del Gobierno recuerdan que uno de cada cinco accidentes con víctimas mortales se produjo por exceso de velocidad, “sobre todo en carreteras convencionales”.
Sólo en lo que va de año, al menos tres de las 27 víctimas mortales registradas durante el año pasado en carretera de Castilla y León viajaban en vehículos que llevaban más velocidad de la permitida.
