Estos oasis de frescura, repartidos por la geografía zamorana, permiten a sus habitantes disfrutar de un clima más amable en medio de un verano abrasador.
Los pueblos que han registrado las temperaturas mínimas más bajas esta semana son:
- Villanueva de Valrojo: 8.9°C
- Ferreras de Arriba: 10.4°C
- Otero de Bodas: 10.9°C
- Camarzana de Tera: 12°C
- Justel: 14.7°C
- Quiruelas de Vidriales: 14.8°C
- Villardeciervos: 15.3°C
- Fuentes de Ropel: 15.8°C
Estos pueblos, ubicados en zonas rurales y rodeados de naturaleza, están resistiendo con éxito las altas temperaturas que asolan otras regiones. La situación contrasta marcadamente con los registros en otras partes del país, donde las temperaturas superan con creces los 35°C durante el día y apenas descienden durante la noche.
El clima más fresco en estas localidades puede atribuirse a varios factores. La altitud y la proximidad a áreas boscosas ayudan a mantener las temperaturas bajas. Además, la escasa densidad de población y la ausencia de grandes concentraciones urbanas contribuyen a evitar el efecto de isla de calor, común en las ciudades.
En Villanueva de Valrojo, con la temperatura mínima más baja de 8.9°C, los habitantes disfrutan de noches frescas que les permiten un descanso reparador. Similarmente, Ferreras de Arriba y Otero de Bodas mantienen temperaturas por debajo de los 11°C, proporcionando un respiro significativo en medio de la ola de calor.
Estas temperaturas más bajas no solo son un alivio para los residentes, sino también un atractivo para los turistas que buscan escapar del calor extremo. El turismo rural en estas zonas ofrece una alternativa refrescante y permite a los visitantes disfrutar del rico patrimonio cultural y natural de Zamora.
Los paisajes, la gastronomía local y la hospitalidad de los pueblos de la provincia se ven complementados por este clima más benigno, convirtiendo a estas localidades en destinos ideales durante los meses de verano.
La resistencia de estos pueblos zamoranos a la ola de calor es un testimonio del valor de los espacios naturales y la vida rural.
En medio de un verano ardiente, estos rincones de Zamora se destacan como auténticos paraísos de frescura, invitando a todos a descubrir y disfrutar de su clima privilegiado y su encanto rural.