viernes. 19.04.2024
Mercado de Abastos
Mercado de Abastos

La cris desatada por la guerra en Ucrania, las consecuentes sanciones impuestas por parte de la Unión Europea y EEUU a Rusia y los cortes en el suministro de gas por parte de la potencia dirigida por Vladimir Putin se suman a un contexto que ya apuntaba a finales de año a una moderada inflación que, finalmente, se ha visto desbocada. Cada mes son más las familias que tienen que hacer números para tratar de llegar a fin de mes. La subida del precio de la luz, el aumento de la factura del gas, del gasto en los repostajes y de la cesta de la compra parecen no contenerse pese a las ayudas implementadas desde el Gobierno y que ahora se fijan en la limitación de los precios de los alimentos. 

El Gobierno y los grandes distribuidores analizarán este lunes una propuesta que busca fijar límites a los precios de los alimentos considerados básicos. Un movimiento que ha generado recelos y posiciones claramente en contra por parte de sectores como el pesquero, pero también del pequeño comercio que asegura que supondría su final.

Y es que, según mantiene la Confederación Española de Comercio (CEC) en un comunicado, la imposición de este tope pondría en peligro el futuro del comercio de proximidad asentado especialmente en los barrios de las ciudades y pequeños núcleos y que fomentaría que los vecinos se desplazaran hasta los grandes establecimientos para adquirir los productos. 

Una situación de la que no se libraría Zamora. Los pequeños comercios aseguran estar ahogados ante las continuas subidas de las facturas energéticas que también les afectan y que les lleva irremediablemente y muy a su pesar, a incrementar los precios para tratar de sobrevivir. "Te ves entre la espada y la pared y lo peor es que la situación no tiene visos de mejorar". 

Y es que autónomos y pequeño comercio viven de una clientela fija que ahora mira y compara, cada vez menos de soslayo y con mayor interés, los precios entre establecimientos. "Se ven obligados a comparar y es normal, pero no nos queda otra". 

Ante esta situación, la patronal del pequeño comercio -también representados por la Asociación Española de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc)- ha asegurado que establecer estos topes supondría un "atendado directo" contra los establecimientos de barrio, ya que supondría un efecto llamada a los ciudadanos que optarán cada vez más por "comprar en las grandes cadenas en detrimento del comercio de proximidad que no puede competir en márgenes ni asumir los costes".

Y es que la inflación es para todos, pero el pequeño comercio dispone de menos herramientas para hacer frente a un contexto que suma ya demasiados meses en rojo. 

El pequeño comercio se rebela ante el acuerdo para limitar los precios de la cesta de...