Hoy conocemos la noticia del cierre definitivo a final de este mes, una de las más dulces y agradables sensaciones, la de que te regalen pasteles y tartas de calidad, desaparecerá a finales de este mes de mayo.
Un negocio más que cesa su actividad, esta vez por jubilación y sin reemplazo deja al pasaje de Olmedo huérfano de dulces y de repostería de tradición y prestigio.
Los intentos por no cerrar están siendo todos, y a la pastelería le seguirá el obrador, un lástima porque cuando se pone fecha a un final o a un cierre, la ciudad pierde fuelle, pierde negocios, y también ilusiones y alegrías.
Siempre fueron los mejores pasteles, desde hace años, llegaron otros se asentaron los demás pero la tradición y el saber hacer de la pastelería por excelencia se quedó en Leandro, toda una institución.
