Félix Marbán y Santiago Fernández, autores de los carteles de la procesión y el Quinario 2015.En la sede social de Jesús Nazareno, sita en la calle Viriato, ha quedado inaugurada la exposición con las obras presentadas al concurso fotográfico organizado por la cofradía, cuyas ganadoras serán respectivamente el cartel que anuncie la procesión de 2015 y el Quinario de la Virgen de la Soledad.
Así, en el caso del cartel de la Madrugada, el ganador ha sido Felix Marbán con su fotografía presentada bajo el lema "Jericó", en la que se puede ver un contraluz del grupo de La Agonía en las Tres Cruces, con las primeras luces del Viernes Santo, en una curiosa alineación con el crucero de piedra al que da la vuelta la procesión antes de efectuar su tradicional parada para emprender el camino de regreso.
Además, el ganador del cartel del Quinario en honor de la Virgen de la Soledad ha sido Santiago Fernández con su fotografía presentada bajo el lema "Resignación", que recoge un bellísimo primer plano de la imagen con el sencillo manto de luto del Sábado Santo y que muestra en todo su esplendor la hermosura de la Virgen más querida de los zamoranos.
Ambos fotógrafos recogieron ayer su premio en la sede de la cofradía, donde permanecerá abierta la muestra al público durante los meses de julio y agosto.
El precioso rostro del Jesús de La Caída, de Ramón Álvarez; el Nazareno de La Congregación de Antonio Pedrero recorriendo las calles en la madrugada; la impresionante factura de Redención, de Mariano Benlliure; el luto y oro de la Virgen de la Soledad en la mañana del Viernes Santo o su sencillo manto de viuda en la tarde del Sábado; el eco del Merlú ante las fachadas; la sombra de los congregantes sobre los adoquines, sus siluetas negras con la cruz al hombro o el sol posándose en la torre de San Juan mientras la procesión del Viernes da la vuelta a la Plaza Mayor son algunas de las instantáneas que los visitantes pueden encontrar en la exposición.
Una exposición que supone una buena ocasión para recordar los momentos vividos durante la pasada Semana Santa y de evocar la madrugada más mágica que vive Zamora cada año, cuando el reloj de San Juan de Puerta Nueva marca las cinco en punto, suena el Merlú y se detiene el tiempo mientras sale a la calle Camino del Calvario para poner en marcha a La Congregación.
