San José Obrero ya luce el primer mural de ganchillo de la ciudad. Una obra de arte que se ha extendido durante algo más de un año, ocho meses dedicados por entero a la realización de los más de 3000 grannys que componen este gigantesco mural -bautizado como el de "las mil manos"- que se encuentra expuesto desde el Día de la Hispanidad.
Las Águedas de San José Obrero son las que han promovido esta iniciativa y cuya colocación fue propuesta por la Asociación de Vecinos del barrio. Una causa que ha implicado a asociaciones, empresas y particulares de toda la provincia que han puesto su particular "granito de arena" donando incluso la lana para la realización de este gigantesco mural. Una auténtica obra de arte que preside una gran paloma de la paz -el único elemento que no está realizado en este material- y que fue elaborada a iniciativa del propio párroco.
Con su colocación Zamora y el barrio en particular ya pueden disfrutar del resultado de semanas de trabajo y de reuniones semanales en las que las Águedas de San José Obrero se han dejado ver tejiendo por las calles del barrio, incluso por el parque de Valorio.
La Asociación Cultural de Videmala ha donado los más de 700 grannys que fueron elaborados para el encuentro "Teje por la España Vaciada" que se celebró en julio del año pasado -se han desechado aquellos que ya presentaban un evidente estado de deterioro- y que ha supuesto una gran ayudar para dar forma a una obra que mide 12 metros de largo por cinco de ancho y que, durante meses, ha protagonizado una de las actividades pendientes.
“Lo que más trabajo nos está dando es unir los cuadros de ganchillo a la red porque van cosidos unos por uno y hay que tratar que no planeen y que su llueve no se den de si”, apunta Pilar la presidenta de las Águedas, que componen unas 85 mujeres.
Si bien en un principio la previsión era inaugurarlo con motivo del día de San José, la multitud de actividades en las que toman parte imposibilitaron que el mural estuviera listo para esa fecha.
