Zamora dará una nueva vida a los antiguos contenedores de vidrio para convertirse en refugios gatunos. Los llamados 'Gatuperios, una idea exportada de Asturias, darán cobijo a los ejemplares ferales y gatos abandonados de la ciudad facilitándoles un lugar en el que guarecerse, al tiempo que brindándoles un punto fijo en el que los alimentadores podrán proveerles de agua y pienso.
El Ayuntamiento de la ciudad en colaboración con la Fundación Personas está dando una segunda vida a 15 de estos antiguos contenedores que permitirá concentrar el alimento en una zona específica para evitar olores, contribuir con una ciudad más limpia y mantener el alimento a salvo de posibles sabotajes o de la presencia de pájaros y otros animales.
Los contenedores destinados a tal uso estarán vinilados para diferenciarlos, mejorando al tiempo su apariencia. A su vez, las colonias estarán señalizadas con la vista puesta en "proteger tanto a los animales como a los alimentadores que tan generosamente dedican su tiempo y recursos a cuidar de ellos". Así lo ha declarado la concejala de Servicios Sociales y Mayores, Igualdad, Cooperación y Salud Pública del Ayuntamiento de Zamora, Auxi Fernández, tras recalcar que se trata de un proyecto heredado de su antecesora en el puesto, Carmen Turiel.
Los contenedores fuera de uso han sido limpiados y adaptados con puertas especiales para que los alimentadores puedan depositar comida en cuencos y que aseguran a su vez una entrada y salida fácil para los gatos en caso de peligro. Estos refugios también ayudan a prevenir que otros animales o personas interfieran con la comida, y proporcionan un lugar seco y seguro para los gatos en días de lluvia. Además, serán vinilados por el Ayuntamiento para mejorar su apariencia y asegurarse de que no incomoden a los vecinos.
Una opción "sostenible" y que da respuesta a la demanda realizada por los propios alimentadores y voluntarios encargados de asistir a las más de 70 colonias felinas y 800 ejemplares. Este proyecto facilitará también la labor diaria de quienes se encargan de su cuidado, atención y alimentación.
Ya con los contenedores listos para su próxima instalación, el Ayuntamiento permanece a la espera de que sea la Policía Municipal quienes den viabilidad y seguridad de las zonas seleccionadas y previamente acordadas con la nueva asociación ZARPA. El objetivo es crear un entorno más ordenado y seguro para los gatos y sus cuidadores, mientras se promueve una convivencia armónica con los vecinos.

