El Ayuntamiento de Zamora ha culminado los trabajos de ajardinamiento en el entorno de San Martín de Arriba, una intervención que responde a la creciente demanda de los vecinos y forma parte de la política municipal de mejora de zonas verdes. Esta transformación ha ampliado en 577 metros cuadrados los espacios ajardinados del casco antiguo, en una zona que antes estaba cubierta por grava y tela asfáltica.
La intervención, que comenzó en julio y concluyó tras la retirada de las vallas de obra una vez consolidado el césped, ha supuesto la instalación de cuatro sectores de riego con un total de 100 difusores de agua. En los nuevos parterres se han plantado rosales, romero, santolina, tomillo y vincas, con la previsión de variar la ornamentación floral según la época del año. Además, se han colocado bordillos de madera para proteger tanto las plantas como los respiraderos del aparcamiento subterráneo cercano.
El proyecto también incluye la renovación del pavimento de la zona adyacente al parque, que anteriormente consistía en tablas de madera en mal estado. Esta mejora ha sido recibida con agrado por los padres de los niños que frecuentan el parque, ya que proporciona un entorno más seguro y accesible.
Pablo Novo destacó que esta actuación es parte de un plan más amplio que abarca distintas zonas de la ciudad. Entre ellas, mencionó las mejoras en la Plaza del Maestro y la Plaza de San Lázaro, así como la creación de nuevos jardines en barrios como Vista Alegre, Amor de Dios y Villa Alpando.
Finalmente, Novo hizo hincapié en la continuidad de los trabajos de restauración de la fuente ornamental de San Ildefonso, inactiva durante más de 22 años, que se espera esté en funcionamiento en noviembre. Esta intervención, junto con otras mejoras en infraestructuras históricas, forma parte del compromiso del Ayuntamiento de revitalizar el patrimonio urbano de Zamora.
