El pasado día 1 de septiembre se celebró la reunión de constitución del Colectivo Hispano Palestino Al'Madafa. El colectivo compuesto por ciudadanos de la capital y de algunos pueblos de la provincia se define como un grupo cuyo objetivo es concienciar sobre la situación que vive el pueblo palestino y la necesidad de que sea respetado su derecho como pueblo a tener un estado propio y a vivir en paz y libertad.
Los miembros del grupo declaran que "no pierden la esperanza de en que en un futuro no muy lejano haya una situación de paz y convivencia en Oriente Próximo".
Según señalan, la Madafa, palabra que le da nombre al grupo, es uno de los espacios más importantes de la casa en los países árabes. El lugar en el que se recibe a los seres queridos y se hace vida social. Según Rafael C. la idea de adoptar este nombre surgió cuando estaba leyendo el libro "Historia de la Palestina moderna" de Ilan Pappe, un reconocido historiador israelí. En un fragmento del libro Ilan Pappe relataba la situación de estrechez de los Palestinos en los campos de refugiados, donde ni siquiera se podían permitir tener un espacio para recibir a las amistades, algo que en el mundo árabe es de suma importancia. Para los miembros del nuevo colectivo, esta carencia refleja la situación de privación en la que se encuentra el pueblo palestino. En muchos casos expulsado de sus tierras, en otros recluidos en terrenos rodeados por muros y vallas fortificadas. Siempre sometidos a la estrecha vigilancia del ejército Israelí, imposibilitados de moverse con libertad y quizás lo que es peor, siempre bajo el temor de ser retenido o incluso detenidos por alguna de las numerosas patrullas militares que patrullan continuamente las calles. Según este colectivo, de entre los muchísimos problemas que se encuentran en la actualidad los palestinos, uno a de los más destacados es la campaña de detención y reclusión de menores que ha puesto en marcha el Estado de Israel en los últimos años. Muchos niños son detenidos y recluidos durante meses sin que haya la mediación de ningún proceso legal. Tanto es así que los familiares ni siquiera tienen la posibilidad de ejercer la defensa del menor cuando este ya está encarcelado. Cuando los menores por fin son devueltos a sus familiares muestran importantes traumas y trastornos provocados por los malos tratos y el propio periodo de reclusión.
Según los miembros del grupo, el colectivo surge con el deseo de poder establecer un dialogo con la sociedad zamorana y de transmitir información que generalmente no es facilitada por los medios de comunicación. Así pretenden hacer cineforums, charlas, exposiciones e incluso actividades de tipo cultural. El colectivo espera que su actividad sirva no solo para concienciar, sino también para enriquecer a la sociedad zamorana y para acercarla a un pueblo fascinante, ya no solo por su resistencia y perseverancia ante la situación a la que se encuentra sometido, sino también por su riqueza cultural que incluye música, poesía y literatura.
