Cáritas Diocesana de Zamora ha conmemorado este martes su 60º aniversario con un emotivo acto de agradecimiento y reconocimiento a todas las personas e instituciones que han formado parte de su historia. Seis décadas de trabajo constante al servicio de los más vulnerables han convertido a la entidad en un referente de acompañamiento, solidaridad y transformación social en la provincia.
El acto, celebrado en Zamora, contó con la presencia del obispo de la diócesis, Fernando Valera, junto a representantes institucionales, sacerdotes, trabajadores, voluntarios y colaboradores que han contribuido a la labor de Cáritas durante estos 60 años.
Durante la ceremonia se entregaron galardones en cuatro categorías, a los trabajadores, sacerdotes, instituciones públicas y voluntarios, en reconocimiento a su implicación y apoyo. En representación del voluntariado, el premio fue recogido por la voluntaria más veterana y la más joven de la organización, símbolo de la continuidad y el compromiso intergeneracional que caracteriza a Cáritas.
El obispo Fernando Varela destacó la importancia de esta efeméride para la diócesis: “Es una alegría muy grande poder celebrar 60 años de esta realidad que es el corazón de la diócesis. Cáritas nació en muchas parroquias y hoy sigue dando fruto, llenándonos de emoción y de esperanza hacia el futuro”, señaló.
Varela subrayó el papel esencial de los voluntarios en la labor de Cáritas: “El voluntario es esencial. Lo más importante de Cáritas es ese acercamiento a la persona vulnerable, al pobre, al necesitado. No somos solo un conjunto de proyectos o profesionales, sino el rostro de una Iglesia que se acerca a quien más lo necesita”, afirmó.
El obispo también se refirió a los desafíos actuales a los que se enfrenta la entidad como la llegada creciente de personas inmigrantes y el problema del acceso a la vivienda, especialmente entre los jóvenes y las familias con menos recursos.
Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Zamora, Fernando Prada, reconoció la trayectoria de Cáritas y su papel en la atención social: “Seis décadas ayudando a las personas. Cáritas ocupa un lugar esencial dentro de la atención a quienes más lo necesitan, proporcionando no solo alimento o cobijo, sino una atención integral. Desde las administraciones seguiremos apoyando su labor con proyectos de inserción sociolaboral y acogida como la Casa Betania”, aseguró.
También intervino Teresa Peral, directora provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social, quien destacó la colaboración de Cáritas con la Administración: “Cáritas Diocesana de Zamora ha trabajado estrechamente con la Seguridad Social, especialmente en la gestión del Ingreso Mínimo Vital. Es una entidad comprometida y eficaz, cuyo trabajo merece el reconocimiento de toda la sociedad”, señaló.
La alcaldesa de Benavente, Beatriz Asensio, expresó su agradecimiento a la organización: “Para nosotros es un honor acompañar a Cáritas en este aniversario. En Benavente siempre han estado presentes, mostrando humanidad y solidaridad. Este reconocimiento es también para todos los ciudadanos que colaboran con su labor”, indicó.
El acto contó además con una actuación especial de los cantantes zamoranos Adrián y Eva, que pusieron el broche musical a la celebración con un repertorio cargado de emoció, en sintonía con el espíritu solidario de Cáritas.
Cáritas Diocesana de Zamora atiende cada año a más de 13.000 personas en situación de vulnerabilidad gracias al trabajo de 300 empleados y 780 voluntarios, una red que refleja la fuerza de la solidaridad zamorana.