viernes. 29.03.2024
Campamento Doney | Imagen cedida por la organización
Campamento Doney | Imagen cedida por la organización

El verano zamorano esta ligado ineludiblemente al Campamento Doney, escenario en más de un cuarto de siglo de diversión y valores cristianos entre niños y jóvenes de la provincia. Una cita con la naturaleza que finalizó este sábado con una excursión a la comarca sanabresa.

Doney se ha convertido en un referente para la diversión y la naturaleza, que cada año atraía a niños y niñas desde los 8 hasta los 18 años, en un total de cuatro turnos. 

Un campamento dirigido por el claretiano Padre Sotillo, que ha acogido, edición tras edición, a más de 250 niños y jóvenes que buscan disfrutar de la naturaleza a través de momentos de reflexión, oración y diversión en valores cristianos. 

La tradición veraniega del Campamento Doney se cortó el año pasado debido a a situación sanitaria, siendo el primer año en la historia del campamento en no realizarse. 

Tras un breve parón Doney se ha reinventado este verano y ha realizado un campamento urbano desarrollado en la finca de “La Milagrosa”, ubicada en la carretera antigua de Villaralbo. Una manera perfecta para poder cumplir con todos las medidas sanitarias existentes.

Un campamento con más de tres décadas de tradición y ocio a sus espaldas.

Campamento Doney | Imagen cedida por la organización

Más de 30 años de naturaleza y diversión en valores