La factura de la luz del usuario medio con la tarifa semirregulada (PVPC) se situó en agosto en 80,71 euros, lo que representa el agosto más caro desde 2022, según el análisis de FACUA-Consumidores en Acción. Esto supone un aumento del 3,2% respecto a los 78,21 euros registrados en el mismo mes del año pasado.
En comparación con años anteriores, la factura del usuario medio ha sido de 78,21 euros en 2024, 73,21 euros en 2023, 158,30 euros en 2022, 93,10 euros en 2021 y 63,77 euros en 2020.
Aunque la cifra de agosto es elevada, representa una ligera disminución mensual respecto a julio, cuando la factura alcanzó los 81,22 euros, apenas 51 céntimos menos, un descenso del 0,6%. El mes más caro del año hasta ahora fue febrero, con 95,70 euros. El perfil de usuario medio tomado por FACUA corresponde a un cliente con 4,4 kilovatios (kW) de potencia contratada y un consumo mensual de 366 kilovatios hora (kWh).
Desde enero, el kW de potencia contratada se mantiene en 14,14 euros al mes, que incluye cargos, peajes y el margen de comercialización. Este agosto, el precio medio del kWh se situó en 24,36 céntimos en horario punta, 15,85 céntimos en el llano y 15,57 céntimos en el valle. En términos interanuales, la energía ha subido un 4,1% en punta y un 4,4% en valle, mientras que ha bajado un 9,7% en horario llano.
FACUA indica que estos cálculos incluyen un 27,19% de impuestos indirectos, con un IVA del 21% desde enero y el impuesto especial sobre la electricidad del 5,11%, vigente desde julio del año pasado.
FACUA reclama cambios profundos en el sistema de fijación de tarifas para evitar que las energías más caras inflen la tarifa semirregulada. La asociación propone que la energía nuclear e hidroeléctrica se venda a precios fijos establecidos por el Gobierno a largo plazo, evitando los llamados “beneficios caídos del cielo” que generan las subastas marginalistas.
Además, la organización critica la falta de campañas del Ministerio para la Transición Ecológica que fomenten la solicitud del bono social, del que muchos beneficiarios potenciales desconocen su existencia o creen que no tienen derecho.
FACUA también recomienda que los consumidores ajusten la potencia contratada a sus necesidades reales. Según la asociación, siete de cada diez viviendas pagan de más cada año por exceso de kilovatios contratados, lo que supone cerca de mil millones de euros anuales.