Con la llegada del verano y el incremento de desplazamientos por carretera, muchos conductores buscan herramientas que les ayuden a viajar con mayor seguridad. Una de las funciones más útiles que ofrece Google Maps, y que muchos usuarios aún desconocen, es la posibilidad de visualizar los radares de tráfico a lo largo de su ruta.
La aplicación de navegación incluye desde hace tiempo un sistema que alerta sobre la presencia de radares, tanto fijos como móviles. Los primeros aparecen señalados en color naranja y suelen estar ubicados en puntos concretos y conocidos, mientras que los móviles se indican en azul, aunque su presencia en la aplicación depende de las actualizaciones de los propios usuarios.
Esta funcionalidad no requiere configuración avanzada: se activa de forma automática al iniciar una ruta en la app. Durante el trayecto, Google Maps muestra los avisos en pantalla y, en algunos casos, también ofrece alertas por voz, lo que permite al conductor estar atento sin desviar la mirada de la carretera.
Aunque estas indicaciones pueden resultar muy útiles, especialmente en trayectos largos o por zonas desconocidas, conviene no confiarse en exceso. Los radares móviles, cuya ubicación puede variar en cuestión de horas, no siempre aparecen reflejados con exactitud. Por eso, más allá de la tecnología, las autoridades insisten en la importancia de respetar los límites de velocidad y mantener una conducción responsable.