Trabajadores, voluntarios y usuarios de los distintos centros y programas de Cáritas Diocesana de Zamora participan en el retiro de Cuaresma dirigido por el Obispo de la Diócesis de Zamora D. Fernando Valera Sánchez.
El retiro de Cuaresma ha tenido lugar este viernes en la Casa Fundacional del Amor de Dios de Toro. Tras las oraciones iniciales, D. Fernando Valera ha introducido un texto del evangelio sobre el que se ha fundamentado su intervención. En ella que se ha referido tanto a Cáritas como ministerio de la Iglesia, como a los agentes de la institución, presentes en la jornada, “Cáritas es el corazón de la iglesia que ejerce el ministerio de la caridad y el amor de Jesús. Estamos llamados a ser personas configuradas con el corazón de Cristo, con la Caridad de Cristo, para llevar su palabra al santo pueblo de Dios. Esto forma parte del camino Sinodal”.
En palabras del Obispo de la Diócesis de Zamora, “formar parte de Cáritas es ser discípulo de Jesús y supone dejarnos conducir por el amor. El significado del amor para un cristiano le da una mirada que va más allá, nos invita a buscar a los alejados y anunciar la palabra de Dios en una profunda comunión, Cáritas y el amor es experiencia de comunión”.
Fernando Valera, quiso destacar el significado de ser Cáritas, “ser miembros del cuerpo de Cáritas, todo el conjunto, todos los que somos Cáritas, es estar atentos a la necesidad de los más pobres, en defensa de los derechos de los más débiles y promotores de una cultura de solidaridad. Es importante la conciencia de quiénes somos y la misión que tenemos de parte de Jesús. Ser parte de Cáritas es estar disponibles siempre para construir e irradiar paz, siendo agentes de acciones buenas de la mano de Dios, es una llamada a estar atento, a ser centinela y a formarnos”.
