Tras días de angustia, humo y sobresaltos, Sanabria ha amanecido este sábado con cielo despejado, sin humo y con la esperanza de escuchar pronto las palabras “estabilizado” y “controlado”. La noche, fría como las de los últimos días, con temperaturas mínimas de entre 5 y 6 grados, y la ausencia de viento han jugado a favor del dispositivo de extinción. Una inversión térmica nocturna y la calma en el ambiente han permitido que el fuego se concentre en la parte más al noroeste del Lago de Sanabria, como advierte la fumarola visible al amanecer.

La tranquilidad nocturna ha sido total, sin incidentes destacados, lo que permitirá dar descanso en las próximas horas a muchos de los equipos que han trabajado sin pausa en los frentes del Tera, el Cárdena y el Forcadura.
El mayor operativo de la historia en Zamora
Según los datos de la Junta de Castilla y León, el operativo autonómico en tierra está formado por:
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18 cuadrillas terrestres
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8 autobombas
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5 bulldozers
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2 unidades ELIF/BRIF
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5 técnicos
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18 agentes medioambientales y celadores
Un total de 69 efectivos de la Junta que hoy estarán reforzados por 5 hidroaviones y varios helicópteros.
A este despliegue se suman los 58 bomberos forestales catalanes, 15 de Melilla, un contingente de 130 miembros de la UME, así como la UME francesa (8 efectivos) y militares del Ejército del Aire desplazados desde León. Además hoy se unirán 50 militares alemanes que ayudarán en las labores de extinción y trabajos en el Parque Natural del Lago de Sanabria.
En cuanto a los medios estatales, siguen trabajando esta mañana:
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1 ALFA desde Requena
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1 FOCA desde Talavera la Real (Badajoz)
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1 ALFA desde Mirabel (Cáceres)
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1 BRIF-A desde Daroca (Zaragoza)
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1 ACO desde León
Mientras que ya han sido desmovilizados:
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1 ALFA de Requena
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2 TANGO de Agoncillo (La Rioja)
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1 TANGO de Son Bonet (Baleares)
Un respiro para Sanabria
Con este despliegue sin precedentes —el mayor operativo aéreo y terrestre de la historia de los incendios de Zamora—, la jornada arranca con mejores perspectivas. Aunque aún queda trabajo por delante, la sensación en la comarca es clara: la pesadilla puede estar tocando a su fin.
Así se veía el incendio anoche en torno a las 2 de la madrugada
