La medida, que se ha activado a primera hora de la mañana, busca garantizar la seguridad de vecinos y visitantes, ya que las maniobras de carga y despegue de los medios aéreos requieren una zona completamente despejada.
El emblemático lago sanabrés se ha convertido en uno de los puntos estratégicos para abastecer a los equipos de extinción, dada su cercanía a varios de los frentes activos. La frecuencia prevista de operaciones durante el día hace imposible habilitar áreas seguras para bañistas sin poner en riesgo la rapidez de las labores.
Desde Protección Civil y la Guardia Civil se pide comprensión y colaboración ciudadana, recordando que la prioridad absoluta es salvaguardar las viviendas y frenar el avance de las llamas, especialmente en la Alta Sanabria y zonas limítrofes con Ourense.