Un conductor ha sido investigado por la Guardia Civil como presunto autor de un delito contra la seguridad vial después de ser sorprendido circulando a 140 kilómetros por hora en una zona con una limitación genérica de 50. La infracción tuvo lugar en la carretera N-610, a la altura del kilómetro 84,800, en plena travesía de la localidad vallisoletana de Quintanilla del Molar.
El vehículo, de matrícula portuguesa, fue interceptado durante un dispositivo de prevención de velocidad realizado por el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Zamora. Según ha informado la Comandancia en una nota de prensa, el exceso era de 90 km/h respecto al límite establecido, una cifra que multiplica por casi tres la velocidad permitida en ese tramo interurbano.
Al superar en más de 80 km/h el límite legal, el conductor fue inmediatamente investigado por un delito tipificado en el Código Penal como contra la seguridad vial. Tanto él como las diligencias instruidas fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial.
Desde la Guardia Civil se advierte del enorme riesgo que comporta este tipo de conductas al volante: “No solo ponen en peligro la integridad del propio conductor, sino también la de sus acompañantes y la del resto de usuarios de la vía”. A velocidades tan elevadas, una frenada de emergencia o una maniobra evasiva pueden desembocar fácilmente en una pérdida total de control del vehículo.
El delito del que se le acusa conlleva penas que pueden ir desde los tres a seis meses de prisión, multas de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de entre 31 y 90 días. Además, lleva aparejada la retirada del permiso de conducir por un periodo de entre uno y cuatro años.
La Guardia Civil insiste en la importancia de respetar los límites de velocidad y recuerda que la colaboración ciudadana es clave para garantizar la seguridad vial. Para ello, pone a disposición de la ciudadanía el número de teléfono 062 y la aplicación móvil Alertcops para denunciar cualquier conducta peligrosa de forma anónima y confidencial.