sábado. 20.04.2024
Foto de archivo de un incendio
Foto de archivo de un incendio

Con el mapa en rojo por riesgo extremo por altas temperaturas y tiempo seco -el caldo perfecto de cultivo de incendios forestales-, la causa no fue sino, de nuevo, la propia acción del hombre. Cuatro de los cinco fuegos que afectaron este pasado lunes a la provincia se considera que han sido intencionados, ninguno de ellos fruto de accidentes o fallos mecánicos. 

El resultado de estos cuatro incendios -que han afectado a los municipios de Figueruela de Arriba, Trefacio, Abelón y Carracedo- deja una estimación cercana a las 15 hectáreas de terreno arrasado. La mañana arrancó con un fuego a primera hora en Figueruela de Arriba y que, pese a la rápida intervención de los servicios de extinción de incendios, ha resultado ser el segundo más virulento de la jornada con 4,5 hectáreas de matorral y jaras calcinado. 

En el caso de Abelón -el último fuego registrado por los servicios medioambientales de la Junta a las 02:45 de la madrugada ya de este martes-, la virulencia del fuego obligó a movilizar a más medios que ha contado con la presencia de tres agentes medioambientales con ayuda de tres autobombas, otras tantas cuadrillas nocturnas, una cuadrilla de tierra así como una dotación de bomberos de la Junta. Las pesquisas apuntan a la intencionalidad de un fuego que se ha logrado controlar -que no extinguir- a las 07:00 horas y que deja 7,5 hectáreas de matorral y pasto afectado. 

Entre las 19:00 y las 21:00 se declararon otros dos focos, el primero en la localidad de Carracedo -perteneciente al municipio de Ayóo de Vidriales- que ha dejado 2,37 hectáreas de pasto arrasado, mientras el de Trefacio apenas ha afectado a 0,1 HA. de terreno. 

En estos momentos las labores de control se centran aún en los municipios de Roales -cuyo foco se dio por controlado pasada la media noche pero que continúa en perimetración, y por lo tanto no se han determinado las causas del mismo-, así como en Abelón. 

Continúa la lucha para controlar los fuegos de Abelón y Roales