Organizada por el Seminario San Atilano y el Grupo Virgen de la Saleta, en colaboración con la Delegación Diocesana para el Patrimonio y la Cultura, la muestra tiene como objetivo dar a conocer la advocación mariana de la Virgen de la Saleta, surgida tras la aparición de la Virgen a dos pastores en los alpes franceses el 19 de septiembre de 1846.
A través de unos paneles informativos se narra la historia de la aparición así como la aprobación posterior por la Santa Sede y la llegada de la nueva devoción a la Virgen de la Saleta a España y, finalmente, a Zamora de manos del obispo Bernardo Conde y Corral, del que se expone su retrato, propiedad del Obispado de Zamora.
Entre las piezas que se exponen destacan los dos grupos escultóricos de la Virgen de la Saleta que existen en la provincia de Zamora, además del de la capital al culto en la Iglesia de San Andrés. Se trata del grupo de la Saleta del Monasterio de Santa Sofía de Toro, una de las piezas más desconocidas del imaginero Ramón Álvarez, y que vuelve a Zamora 150 años después de que Don Ramón lo enviase en tren desde Zamora a Toro, tal y como atestigua el recibo que se conserva en la base de la peana de la Virgen.
Se expone también el grupo de la Virgen de la Saleta del Monasterio Cisterciense del Salvador, de Benavente, de la escuela de Gerona de la segunda mitad del siglo XIX.