Con el inicio del verano, la Asociación Criosanabria ha renovado su campaña para prevenir los incendios forestales, enmarcada en el Proyecto Libera, ante el creciente riesgo derivado del cambio climático y el abandono del campo. La organización destaca la necesidad de adaptar las políticas de lucha contra incendios a este nuevo escenario, enfocándose en la prevención integral y la gestión sostenible del territorio.
La campaña, difundida a través de redes sociales y carteles en establecimientos públicos, hace un llamado a la concienciación y participación ciudadana para reducir los incendios. Enfrentando los desafíos de sequías y olas de calor, así como la presencia de monocultivos de pinos que favorecen la desertificación, la Asociación advierte sobre la creciente amenaza de macroincendios, que han aumentado un 175% en la última década.
El abandono del campo y la falta de gestión adecuada de la vegetación en áreas de riesgo contribuyen al peligro inminente de incendios incontrolables. La organización enfatiza la importancia de una correcta zonificación para determinar las áreas de intervención tras un incendio, así como la necesidad de preservar el suelo y la biodiversidad.
La Asociación hace hincapié en la responsabilidad de todos en la protección del medio ambiente y la prevención de incendios, destacando el papel fundamental de la comunidad en la conservación de nuestros montes y paisajes. Con un enfoque en la prevención y la sensibilización, la campaña busca promover una cultura de cuidado y respeto hacia nuestro entorno natural, crucial para la supervivencia de ecosistemas y especies en peligro.