Debido a su sistema de construcción entre sus oquedades ofrecen refugio a numerosas especies y les permiten transitar por ellas. Además, se crean hábitats propicios para el desarrollo de numerosas plantas de ambientes rocosos.
Desde el punto de vista humano servían de refugio contra el viento y la lluvia y está demostrada su eficacia como cortafuegos.
Los muros secos en la zona de Sanabria al igual que otros espacios naturales se ven amenazados por la construcción de un parque fotovoltaico en el termino municipal de Cobreros y que afectaría a mas de un millar de fincas y 300 hectáreas de terreno.
Esta iniciativa está enmarcada dentro del Proyecto Libera y desarrollada por voluntarios de La Asociación y Club Montañismo Sanabria.