La Junta de Castilla y León ha anunciado una inversión de casi 40 millones de euros para mejorar el abastecimiento y la depuración de agua en 166 municipios. Este proyecto busca garantizar un servicio eficiente y sostenible, especialmente en localidades con menos de 2.000 habitantes. La provincia de Zamora será una de las beneficiadas con la construcción de nuevas estaciones depuradoras. Estas mejoras permitirán cumplir con los estándares ambientales y evitar la contaminación de ríos y acuíferos.
Las obras de depuración de aguas residuales se centrarán en municipios que actualmente no cuentan con sistemas adecuados. En Zamora, se construirán nuevas estaciones en Pobladura de Aliste, Moraleja de Sayago, Algodre y otras localidades. Las tecnologías empleadas incluyen Tanques Imhoff y Humedales Artificiales, que garantizan un bajo consumo energético. Con este programa, se busca avanzar en el objetivo de reducir la contaminación del agua y mejorar la calidad de vida de los habitantes.
Además de la depuración, el plan contempla la renovación de redes de abastecimiento para evitar fugas y mejorar la eficiencia del sistema. Se reemplazarán tuberías antiguas y se instalarán contadores inteligentes con telelectura. Estas mejoras reducirán las pérdidas de agua en un 30 % y facilitarán una mejor gestión del consumo. La Junta colabora con las diputaciones y los ayuntamientos para desarrollar este proyecto de forma coordinada.
El 6 de febrero se licitará un nuevo paquete de proyectos para mejorar las redes de abastecimiento en 85 municipios. La provincia de Zamora contará con varias actuaciones para modernizar sus infraestructuras hidráulicas. Estas obras permitirán una mejor distribución del agua y garantizarán el suministro en zonas rurales. La inversión total en esta fase alcanza los 36 millones de euros, que se destinarán a estudios y ejecución de las mejoras.
Con este plan, la Junta refuerza su compromiso con la sostenibilidad del agua en Castilla y León. La optimización del ciclo del agua contribuirá a la preservación del medio ambiente y al bienestar de los ciudadanos. La instalación de nuevas tecnologías permitirá un mayor control sobre el consumo y una gestión más eficiente.