El circuito de mini motos, que es una instalación situada en el camino de Santiuste, en las afueras de Morales del Vino, fue construido por el propio Ayuntamiento y es de propiedad municipal. En 2015, con el Gobierno del Partido Popular y con José María Barrios como alcalde, la gestión fue cedida a Morales Sport, junto al resto de instalaciones deportivas del pueblo, "comenzando en ese momento el declive y abandono total de lo que un día fue uno de los principales puntos de competiciones y ocio de la provincia".
Desde UPL señalan que "un conocido club de la provincia se vio obligado a abandonar el uso de las instalaciones pues la empresa que las gestiona solo ponía trabas y pedía barbaridades por el uso de las instalaciones" y añaden que "Exquisite Motor Club llegó a convocar una concentración en señal de protesta".
Marta Vicente, concejala del Ayuntamiento y candidata a la Alcaldía por UPL califica de "inaceptable y denunciable" el estado en el que se encuentran hoy las instalaciones.
"Unas pistas abandonadas, con las puertas del recinto abiertas de par en par, cerraduras forzadas, vallas caídas, frigoríficos y escombro, síntomas de un abandono total por parte de la empresa que gestiona Morales Sport y señal de que al equipo de Gobierno formado por PP-Cs les da exactamente igual", denuncia la concejala.
"La actual alcaldesa, por aquel entonces tesorera del Ayuntamiento y el actual teniente de alcalde, por entonces alcalde, regalaron las instalaciones y las condenaros al abandono al igual que hicieron con la piscina climatizada, obra faraónica hoy cerrada", apunta Marta Vicente. Desde UPL exigen al Gobierno municipal que tome medidas e "intervenga inmediatamente".
