Según comentaba el presidente de la organización sindical agraria en zamora Lorenzo Rivera, la falta de regulación en los sectores agroganaderos marcan situaciones como la que se podría haber dado en Zamora el año pasado en la que varias empresas se fijaron en la provincia para asentar macrogranjas como la de Nobiercas en Soria, que tienen más de 20.000 cabezas de ganado vacuno y que al no estar regulado ni el límite de cabezas ni las producciones por explotación habrían causado de nuevo un problema en la provincia.
La falta de regulación de este tipo de explotaciones, y la despoblación, así como el abandono de grandes extensiones de terreno en las localidades de provincias con grandes ratios de despoblación y abandono, serían el caldo de cultivo idóneo para implantar macrogranjas de en este caso vacuno y de producción de leche como mayor exponente. Las normas que la JCyL puso en vigor y sigue adaptando no hablan de las macro granjas de bovino, de ahí que el sector vuelva a tener momentos de alarma como el que tuvo en pasadas fechas en la provincia cuando varias empresas pasaron por la Diputación de Zamora para interesarse sobre como estaba la regulación en este caso en la provincia.