Jornada complicada y triste. El subdelegado del Gobierno en Zamora ha realizado un balance más en profundidad tras los primeros datos aportados en la noche y que dejaban cortes en una docena de carreteras, entre ellas la A-6 a la altura de Paradores de Castrogonzalo, pero también la A-11 y la N-122, y retenciones kilométricas que han dejado a cientos de coches atrapados durante horas.
"El balance que hago es de cierta tristeza porque creo que se pasaron muchos puntos rojos". Ángel Blanco ha hablado de momentos de auténtico colapso, especialmente en la A-6 donde se llegaron a registrar colas de hasta 22 kilómetros que hacía "prácticamente imposible la atención" al conjunto de afectados y que obligó a movilizar a Cruz Roja para ofrecer agua y alimentos a los ciudadanos retenidos en la carretera. También en la A-11 en Roales donde las alpacas llegaron a ocupar los accesos a la vía.
Desde la Subdelegación muestran su empatía y apoyo al sector, si bien remarcan que "las formas" mostradas ayer no fueron las correctas teniendo en cuenta que ninguna de las protestas ni cortes había sido previamente anunciado, lo que complicó la coordinación policial para mantener la seguridad vial en las zonas finalmente afectadas. "De todas las movilizaciones que se están produciendo solo está comunicada a las dos que se van a desarrollar el próximo viernes el día 9 en Zamora y en Benavente". En este sentido, Blanco recuerda la necesidad de actuar con previo aviso para no poner en riesgo la Seguridad Vial.
Una intervención "complicada" para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado cuya actuación ha sido arropada por parte de la Subdelegación al asegurar que actuaron actuaron bajo los principios de "proporcionalidad y congruencia": "Ni con cinco o diez veces más de policías hubiese sido suficiente".
Una jornada en la que Zamora vivió un caso de violencia de género con riesgo extremo y un accidente con intento de fuga incluido, situaciones que, aseguran, también hay que atender y que coincidían con la presencia casi total de los tractores por las calles de la ciudad.
Blanco ha remarcado que, pese a que "la mayoría de los participantes durante estos días han tenido un comportamiento correcto", no se pueden repetir este tipo de actuaciones que han ocasionado numerosos inconvenientes. Pese al paso de ambulancias y la descongestión puntual en zonas como la A-6, desde la Subdelegación aseguran haber recibido llamadas de médicos atrapados y sin posibilidad de atender avisos y visitas programadas así como de personas mayores con ataques de ansiedad.
