Monitores voluntarios se han desplazado hasta el albergue de Camarzana de Tera, donde se encuentran alojados mayores y pequeños evacuados por los incendios de Puercas y Molezuela de la Carballeda.
Con pinturas, aros, balones y, sobre todo, muchas ganas de aliviar la situación, estos voluntarios están dedicando su tiempo a organizar actividades lúdicas que hacen más llevadera la estancia de los afectados.
Los más pequeños, que quizá no llegan a comprender del todo la gravedad de lo ocurrido, son los más agradecidos con estas iniciativas. Entre juegos y talleres creativos, encuentran un respiro en medio de una situación difícil que ha obligado a muchas familias a abandonar sus hogares.
