
La Asociación Zamorana de los caminos de Santiago, ha celebrado este fin de semana, su asamblea general anual, en la que se han establecido algunos acuerdos para el mantenimiento y la defensa de los trazados jacobeos por la provincia de Zamora.
“Después de más de dos años en los que nos hemos visto obligados a tener que cerrar nuestros albergues y nuestros caminos, parece que todo vuelve poco a poco a la normalidad y a pesar de que el año 2022 resultó un tanto atípico respecto a ediciones anteriores, confiamos que poco a poco se vaya normalizando nuestra vida y también la peregrinación”, han explicado desde la asociación.

Y es que, en los últimos años han hablado de caminos, sobre todo, de aquellos aspectos que son mejorables. “Durante este tiempo, la comisión encargada del mantenimiento de los caminos, ha estado repintando los 500 km de trazado que hay en nuestra provincia y la última actuación, ha sido en la subida del Padornelo que, por falta de un acuerdo para colocar un pequeño puente de madera, nos hemos visto obligados a retomar el trazado anterior, para evitar problemas a los peregrinos”, han indicado.
Además, han explicado que la sequía que se produjo a mediados del año pasado y los incendios de la Sierra de la Culebra y Losacio, obligaron a los peregrinos a comportarse de una forma irregular, de hecho, disminuyó el número de personas que recorren los caminos, algo que “se ha visto reflejado después de la reapertura de nuestros albergues en Fontanillas de Castro y Tábara”.
Además, han asegurado que seguirán incidiendo en algunos temas, como la mejora del entorno de la Cruz del rey don Sancho o la protección del Santiago peregrino de Santa Marta de Tera. También propusieron al Ayuntamiento de Benavente un proyecto para la mejora de los accesos a la localidad y “a pesar de haber abandonado el proyecto de acondicionar por nuestros medios, un punto de acogida en Almendra del Pan, seguimos considerándolo imprescindible para dinamizar este camino, que puede representar un revulsivo importante para los pueblos por los que discurre en las comarcas de Alba y de Aliste”.
Sin embargo, uno de los temas de los que “nos sentimos especialmente satisfechos, es de la acogida tradicional que nuestros albergues en Fontanillas de Castro y Tábara, están ofreciendo los peregrinos, lo que es apreciado como uno de los valores que se ofrecen en la provincia de Zamora”.
Este año, continuarán con el plan de señalización de los caminos, “es conveniente actualizarlo cada poco tiempo para que los peregrinos sepan por donde deben caminar y a pesar de que seguimos sin contar con medios y ayudas para la gran cantidad de pintura que utilizamos cada año, mientras podamos, continuaremos haciéndolo”.
Además, desde la asociación han asegurado que “no vamos a desistir en nuestro propósito de conseguir que las administraciones públicas se hagan cargo de habilitar el punto negro que tiene el camino zamorano-portugués, para que sea recorrido por un número importante de peregrinos y continuaremos insistiendo para que el entorno de la Cruz del rey don Sancho y el Santiago peregrino de Santa Marta de Tera, cuenten con la protección y mantenimiento necesario para crear un entorno agradable en un caso y su protección en el otro”.
“Comenzaremos un proyecto propuesto por uno de los socios, que consiste en catalogar y hacer un inventario de los mojones y monolitos específicos que hay en nuestra provincia, así como fotografiarlos y geolocalizarlos, para ponerlos en valor y evitar que, con el tiempo, lleguen a desaparecer”, han asegurado.
Además, durante el acto, se han renovado los cargos de la junta directiva: José Almeida, presidente, Flora Pérez, vicepresidenta, Enrique González, secretario, Mercedes Martín, tesorera y Andrés Gullón, Antonio del Amo, Fernando Chamorro y Javier Fresno, vocales.

“Nuestros caminos, son importantes, representan un patrimonio que hemos heredado y debemos mantener y proteger, por eso desde la Asociación Zamorana de los caminos de Santiago, continuaremos poniéndolos en el lugar que les corresponde y trataremos de que tengan el reconocimiento que se merecen, a pesar de la incomprensión que muchas veces percibimos en quienes deberían ser los custodios de este patrimonio”, han concluido en un comunicado.