El año 2015 que hoy termina ha estado también marcado por los sucesos, sobre todo los accidentes en las carreteras de la provincia. Todos han teñido de negro la actualidad y muchos de ellos se han cobrado víctimas mortales.
Estos hechos se remontan a principios de año. Cuando el 2015 cumplía solo tres días de vida, un choque frontal en el kilómetro 483 de la N-122, a la altura de Muelas del Pan, causó cuatro muertos (tres de ellos en el acto) y cinco heridos.
De la misma manera, otro de los accidentes más trágicos tuvo lugar en agosto, cuando tres menores fallecieron y dos resultaron heridos en un accidente en la Nacional 122, en el kilómetro 482, a la altura del cruce de Cerezal de Aliste. El suceso, que alcanzó repercusión nacional, se produjo a consecuencia de la colisión entre un turismo (donde viajaban los pequeños) y un camión que venía de Portugal.
Por estas fechas también se produjeron otros dos accidentes en Toro, donde un hombre falleció tras volcar su tractor, y en Villaralbo, donde una mujer murió y otras dos resultaron heridas a causa de un accidente en la rotonda de Moraleja.
Y, aunque no fue exactamente en la provincia, es necesario recordar el múltiple accidente del pasado mes de octubre en la A-6, a la altura de Medina del Campo, con 15 heridos y 30 vehículos implicados. Al día siguiente, una nueva colisión múltiple en el mismo lugar se cobró la vida de una mujer.
El año termina también hablando de este tipo de noticias. A principios de este último mes, dos personas perdían la vida en un accidente en Burganes de Valverde tras colisionar su coche con otro vehículo que circulaba por la carretera ZA-100.
Además, en los accidentes de 2015 también se han visto implicados motoristas. Uno de ellos falleció en septiembre tras colisionar con un turismo a la altura de Tábara y otro joven, que perdía la vida mientras conducía una moto de cross y sufrió una caída desde un paso elevado a la autovía.
Y, al margen de los accidentes de tráfico, es preciso señalar el caso de violencia de género vivido en Morales del Vino, cuando un hombre apuñaló a su exmujer y a un Guardia Civil. Afortunadamente, ambos no perdieron la vida y la provincia demostró una vez más su firme rechazo a la violencia de género.