La organización Ecologistas Zamora ha presentado formalmente sus alegaciones al proyecto de ampliación de la cantera “La Zapatera” en Manzanal de Arriba. La asociación advierte sobre las graves irregularidades expuestas en el propio proyecto y la amenaza que representa para un valle único en la provincia.
El valle de "La Zapatera" es un enclave de excepcional valor en términos de orografía, flora y fauna. Este lugar alberga diversos restos arqueológicos y etnográficos, catalogados como bienes integrantes del patrimonio cultural. Gracias a su situación geográfica y las fuertes pendientes que superan el 35%, el valle ha configurado un estrecho desfiladero donde habitan numerosas especies, incluyendo lepidópteros en vías de extinción. La zona también es notable por su valor en el estudio de musgos y líquenes, debido a los imponentes afloramientos de roca.
La biodiversidad del valle incluye una abundancia de robles, alisos, cerezos silvestres, espinos blancos longevos, álamos negros y temblones, y brezales húmedos atlánticos, así como una sorprendente variedad de helechos. Además, los restos arqueológicos en el área consisten en cazoletas y petroglifos, antiguos molinos, muros de piedra seca y puntones de lajas de piedra.
Ecologistas Zamora ha señalado varios errores y discrepancias en el proyecto presentado ante la Delegación de Industria, Comercio y Economía de Zamora. La más grave de ellas es la ubicación incorrecta de la explotación minera en los documentos, lo cual sugiere un intento de evadir problemas relacionados con la proximidad al regato de La Zapatera y la zona de uso comunal.
Otra irregularidad notable es la licitación de la cantera a GNEISTONE S.L., basada en una desafectación polémica y actualmente en litigio. Esta desafectación se realizó certificando falsamente que los terrenos no habían sido utilizados durante 10 años, a pesar de la existencia de documentación oficial que demuestra lo contrario.
El terreno sobre el que se pretende asentar el proyecto no ha sido restaurado, contrariamente a lo indicado en el proyecto. La cantera, operativa desde 2001, ha ocupado terrenos en zonas de policía y dominio público hidráulico, creado taludes y escombreras ilegales, y afectado negativamente el cauce del regato.
El nuevo proyecto amenaza con ocupar una zona de alta biodiversidad, atravesada por una línea de alta tensión y accesible únicamente a través de caminos públicos, lo que representa un peligro para los vecinos de Manzanal de Arriba.