
Se ha producido la "tormenta perfecta". A los elevados costes energéticos se han unido la escalada de los precios del transporte y unos bajos precios de la leche y la carne. Todo ello pone en jaque a muchas explotaciones ganaderas de la provincia ante unas industrias que se niegan a pagar más dinero por el litro de la leche de vacuno para que no repercuta en el consumidor.
Ante esta situación, UPA y COAG se concentrarán de forma conjunta frente a la fábrica Lactalis de Zamora, a las 12 horas, para solicitar un incremento de precios. Actualmente, el litro de leche se paga a unos 32 céntimos, pero "los costes de producción ya superan los 40 céntimos", avisa Lorenzo Rivera, secretario general de COAG.
A ello hay que añadir el aumento del precio de los piensos por la decisión de algunas fábricas de paralizar la producción ante la subida de los costes de la luz y el gas. "Puede haber problemas de desabastecimiento", advierte Aurelio González, secretario provincial de UPA.
COAG ha puesto cifras a esta "amenaza", Los precios de la energía para los agricultores y ganaderos se han encarecido un 300% en el último trimestre, los fertilizantes un 100%, el gasóleo un 40% y los plásticos un 50%, según datos difundidos por la organización agraria COAG.
El futuro del porcino también se vislumbra negro con la caída de las exportaciones a China, tanto en cantidad como en precio, y la situación de los agricultores tampoco se presenta nada halagüeña con el gasóleo y los fertilizantes cada vez más caros.
"El 40% del coste de la sementera de cereal se va en fertilizantes, Si el gasto anual en Castilla y León era de 450 millones de euros y ahora se duplica, las cuentas no salen", subraya Lorenzo Rivera, que estima que los agricultores de la comunidad se reparten unos 1.000 millones de euros en la PAC, pero que gastarán unos 800 en abonos.
Sin embargo, la principal "amenaza" es, según Aurelio González, el desabastecimiento que se puede producir en unos meses del aditivo "adblue" para tractores, un producto que se añade al gasóleo para reducir las emisiones de CO2. "Sin él, los tractores deberán parar", apunta el secretario provincial de UPA.
Ante las consecuencias por esta situación, tanto UPA como COAG han reclamado a la Junta, en una reciente reunión con el consejero de Agricultura, medidas de choque urgentes para el sector vía rebajas fiscales y ayudas directas.