El machete o bolomachete es el arma fetiche de las bandas juveniles, un cuchillo de grandes dimensiones utilizado habitualmente en la selva para despejar vegetación o cortar caña de azúcar. Trasladado a la ciudad, su envergadura lo convierte idóneo para defenderse o atacar.
Y es que esta en boca de todos, los continuos y graves enfrentamientos entre bandas juveniles llevaron la semana pasada a que el Secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, se reuniera con la Delegada del Gobierno de Madrid, Mercedes González, y los máximos responsables policiales de Madrid con el fin de dar respuesta a una demanda histórica de los agentes que luchan contra este tipo de criminalidad: “Que llevar un machete sea delito, si no hay una justificación normalizada”.
