Durante el mes de septiembre, el incremento anual del IPC fue del 9 por ciento, lo que supone un punto y medio menos que en el mes de agosto. Algo que hace presagiar un frenazo de la inflación o el haber llegado a un tope que puede ser el principio de un reajuste económico grave.
Con la vista puesta en lo que Putin pueda hacer en estos días de indecisión los bancos centrales mantienen una política de contención si bien la crisis energética y de estabilidad está más que servida en este momento en todo el mundo.
La geopolítica manda en estos momentos y la indecisión en los mercados es total debido al fenómeno guerra que acentúa el ya complicado panorama que se avecina en un otoño invierno que podría ser el de la entrada en barrena o el de dejar atrás la crisis si cesan las hostilidades en Ucrania que tampoco se prevé que vaya a ocurrir de forma inminente tras el anuncio de Putin de llevar a filas a más de 200.000 soldados. Las fronteras están siendo en estos días vías de escape pero la prohibición de salir del país ya es un hecho.