El diputado electo y hasta ahora portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, ha renunciado a coger su acta en el Congreso de los Diputados y pone fin a su cargo en la cúpula de la formación liderada por Santiago Abascal. Una renuncia que atribuye a motivos personales y familiares pero que llega apenas dos semanas después de que Vox perdiera 19 escaños con respecto a los comicios de 2019.
"Mis padres no son tan jóvenes, mis hijos no son tan mayores y, aunque actualmente todos están bien, he pasado suficientes noches en el hospital con ellos para meditar acerca del momento vital en el que me encuentro", ha precisado en una rueda de prensa sin preguntas y en el que tampoco ha hecho referencia alguna a los resultados de las elecciones.
Pese a ello, Espinosa de los Monteros asegura que se marcha con "enorme optimismo y confianza" en la capacidad de los españoles para construir un país mejor. Su adiós de la Cámara baja supone abandonar la dirección de la formación, si bien se mantendrá como "afiliado base" y "siempre a la disposición de los dirigentes".
Espinosa de los Monteros, que concurrió como número tres en la lista de Vox por Madrid y ejerció de secretario general de Vox en sus inicios, se despide agradeciendo la experiencia y con "la esperanza de ver más pronto que tarde a Santiago Abascal en el Palacio de la Moncloa" con quien ha sido un "privilegio" poder trabajar.
