Renfe ha anunciado una actualización en su compromiso de puntualidad que entrará en vigor el 1 de julio. A partir de esta fecha, la compañía devolverá el importe íntegro del billete cuando el retraso supere los 90 minutos, en lugar de los 30 minutos establecidos hasta ahora. Además, ha introducido un sistema de puntos, llamado "Renfecitos", que permite a los viajeros obtener hasta el 200 % del importe del billete en compensación.
El Consejo de Administración de Renfe aprobó esta medida para alinearse con otros operadores de alta velocidad como Ouigo e Iryo. Con este cambio, Renfe ofrece condiciones similares a la normativa general, aunque asegura mantener el mejor compromiso de puntualidad del mercado. Las nuevas compensaciones serán del 50 % para retrasos superiores a 60 minutos y del 100 % para demoras mayores de 90 minutos.
Renfe también ha ampliado las opciones de reembolso. Además del reembolso en metálico, introduce dos nuevas modalidades: la devolución del 200 % del importe en puntos "Renfecitos" a través de la tarjeta de fidelización Más Renfe y la compensación en un vale de compra para otro billete, con un reembolso equivalente al 150 % del importe indemnizable.
Los billetes comprados antes del 1 de julio seguirán bajo el compromiso actual, que devuelve el 50 % del billete con 15 minutos de demora y el 100 % con 30 minutos. En 2023, la política de compensaciones por retrasos costó a Renfe 42 millones de euros, aunque si todos los viajeros hubieran solicitado su derecho, el importe habría ascendido a 60-70 millones de euros. Renfe sigue devolviendo los importes independientemente de si las causas de la demora son imputables a la compañía.
FACUA-Consumidores en Acción ha manifestado su descontento con esta actualización. Considera inaceptable que Renfe reduzca su compromiso de puntualidad y deje de indemnizar los retrasos a partir de 15 minutos. FACUA critica que Renfe iguale sus políticas a las de otros operadores, afectando negativamente a los derechos de los usuarios.
FACUA también señala que la modificación llega en un momento de aumento significativo en los retrasos de trenes, justo después de la liberalización del transporte ferroviario de viajeros. La organización insta a Renfe a mejorar sus servicios y reducir los retrasos y cancelaciones, en lugar de disminuir las garantías a los usuarios.
